¿CÓMO ME VOLTEÓ?

Cucaracho ya no puede caminar porque le falta un corazón para amar. 

ANO-Belfast- Se acabaron los grupos separatistas mas no las separaciones. Ayer era un cucaracho, hoy es un hombre patas arriba que no se puede levantar de la cama. La depresión se adueñó de sus fuerzas y sus articulaciones regurgitan recuerdos extraños de la luna de miel que nunca tuvo. Se casó creyendo que su cucarachita le iba a dar los huevos suficientes para ser feliz por siempre. La cucaracha resultó ser una perra y, a los dos años, ya le estaba pidiendo el divorcio mientras empezaba a salir con el cucarrón James O'Hara. No le iba a dar su firma tan fácil el cucaracho pero no por voluntad sino porque era un analfabeta. O'Hara después de las noches románticas con la cucaracha perra, se sentaba a enseñarle a escribir como James Joyce para que algún día el cucaracho por fin firmara el acta de divorcio. Aprendió y su firma fue como el final de una larga espera. Como si cucaracho se tornara en un Samuel Beckett pendenciero. Ahora, después de haber sido un cucaracho y a fuerza de tanto escribir, se ha convertido en un hombre que no se puede parar de la cama, y que deprimido clama por ayuda mientras ve los últimos transbordadores de la Nasa que salen de su natal Belfast partir hacia la constelación Cóndor.